El objetivo de este artículo es arrojar luz sobre las maneras en que las piezas medievales eran reelaboradas y re-exhibidas en nuevos contextos durante la Edad Moderna como si fuesen spolia de un pasado memorable. Así, se toma la historia material del coro de la Catedral de Cuenca como ejemplo para establecer conexiones con otros contextos culturales y artísticos y demostrar que ciertos objetos medievales adquirían connotaciones históricas que la gente entendía y aprovechaba a lo largo de los siglos. Además, tras desvelar la compleja serie de campañas de renovación que dicho coro sufrió desde la década de 1470 hasta el siglo XVIII, se presenta una hipótesis que identifica los restos materiales de la primera sillería creada por los hermanos Hanequín de Bruselas y Egas Cueman a mediados del siglo XV y explica por qué esta tuvo que ser renovada muy poco tiempo después de su creación.