El artículo aborda la complejidad del impacto pandémico en contextos de alta incertidumbre estructural, déficits institucionales y vulnerabilidad social. Basado en una amplia revisión bibliográfica, el argumento tiene como premisa el carácter público y letal de las pandemias y su naturaleza implosiva sobre los estándares básicos de la vida social, las prácticas de carácter rutinarias o reflexivas, las cosmovisiones, las creencias, así como las formas históricas de interacción, asociación y de acción colectiva de una determinada comunidad. Además, pone en el centro de atención la capacidad de respuesta de los gobiernos al COVID-19, sus trayectorias de políticas sanitarias y la cultura cívica de la sociedad. Recupera la noción de confianza social, tanto horizontal entre ciudadanos, como vertical entre estos y gobierno, componente clave en la construcción de capital de acción colectiva para ampliar el paquete de opciones de respuestas a la pandemia, reconociendo el reto comunicativo. Finalmente, subraya que, en estos entornos, la crisis pandémica reta los cimientos mínimos de equidad y justicia social.