El monitoreo de la calidad del aire favorece una adecuada planificación urbana y la implementación de políticas que garanticen la salud pública. La mayoría de los municipios de Colombia carecen de redes de monitoreo de calidad del aire. Es el caso de La Ceja (Antioquia), que ha presentado en los últimos años un acelerado crecimiento demográfico y urbanístico asociado al incremento del parque automotor con posibles efectos de contaminación atmosférica. Atendiendo a esta situación, se desarrolló una investigación para obtener información indicativa sobre la calidad del aire y conocer la percepción de la salud que tiene la población. Se instalaron en diferentes sectores dispositivos de bajo costo que midieron concentración de material particulado de hasta 2.5 µg (PM2.5) durante 5 meses consecutivos. Para conocer la percepción ciudadana del estado de salud, las personas, que tenían a su cargo los sensores diligenciaron encuestas semanales. Con los datos medidos se realizaron análisis temporales y espaciales. Los resultados sugieren que, de acuerdo con la normatividad colombiana, la categoría predominante para promedios de 24 horas de PM2.5 es buena (84%). Sin embargo, en algunos eventos puntuales como las fiestas de fin de año (2021) se observaron las mayores concentraciones de este contaminante con categoría aceptable, asociadas al uso de pólvora. La percepción del estado de salud que tienen los participantes en el estudio es buena (91%). Estos resultados plantean la posibilidad que este tipo de redes ciudadanas puedan ser usadas como apoyo para la gestión ambiental y la salud pública en municipios intermedios.