“…Algunas de estas nuevas perspectivas pusieron su eje en las memorias de los conscriptos (Clarke et al, 2007;Guber, 2004b), mientras otras lo hicieron en la sociedad argentina de posguerra (Guber, 2001), en la prensa y la generación de una cultura de guerra (Tato y Dalla Fontana, 2020) y en el trato que recibieron los soldados y sus familiares a su regreso de las islas (Chao, 2015;Lorenz, 2017;Panizo, 2016;Rodríguez, 2015). Por fuera de estas perspectivas, algunos investigadores abordaron el estudio puntual de la guerra en su faz propiamente bélica tomando en cuenta la experiencia de los propios veteranos (Barrutia, 2020;Guber, 2016;Guber et al 2022;Lorenz, 2014;Melara, 2012;Rodríguez, 2020;Soprano, 2018;2020a). Solo marginalmente, algunos estudios (Lorenz, 2014) lograron sembrar pistas sobre la posible relación entre la guerra de 1982, la extensión de frontera concreta que implicaba -con sus imaginarios y prácticas-y el proceso que se había dado en el continente durante el siglo XIX respecto a la invasión y conquista de tierras de los pueblos originarios.…”