“…Existe gran cantidad de estudios que muestran la motivación intrínseca como un elemento fundamental en el desempeño de las personas en ambientes académicos, dado que involucra percepciones individuales descritas como labores emocionantes y desafiantes (Ringelhan et al, 2013), así como la existencia de una cierta cantidad de autonomía, espacio para la creatividad, variabilidad en las labores y propósitos estimulantes y envolventes (Amabile, 1997;Deci, 1980). Ringelhan et al (2013) sugieren, incluso, que el personal académico con alto grado de motivación intrínseca, son grupos trabajadores más comprometidos, persistentes, ponen mayor énfasis en su desempeño y establecen metas más exigentes que sus colegas con un menor grado de motivación.…”