Clinical case description: We report the case of a patient who underwent a double-pigtail ureteral stent (DPS) retrograde placement, following a complicated right renal colic. After two days with persisting pain and hematuria, a CT-Scan revealed a proximal pigtail misplacement into the inferior vena cava (IVC). In a multidisciplinary approach, an endourological removal was performed, pulling the distal loop with a cystoscope, while the vascular surgery team performed femoral access and phlebography during and after the DPS removal to prevent bleeding from IVC. Abdominal access for laparotomy was ready, anticipating potential bleeding. Relevance: DPS retrograde placement is a very frequent, usually uneventful procedure, but major complications may occur, such as the one described in the present case. It is important to know the risk of intravascular misplacement of the DPS, especially in cases of bad evolution or hematuria. Conclusion: DPS intravascular migration is a rare but potentially severe complication. An early detection and a multidisciplinary collaboration between the urology and vascular surgery teams is paramount to perform a minimally invasive removal and prevent major events.

Descripción del caso clínico: Presentamos el caso de un varón de 55 años que acudió al servicio de urgencias del hospital tras haber sido mordido en el pene por su perro. Este accidente le ocasionó varias lesiones en la superficie del glande y una avulsión circunferencial de la piel desde el surco balanoprepucial hasta la base del pene. El escroto, testículos, cuerpos cavernosos y uretra estaban intactos. Relevancia: El traumatismo genital causado por mordedura animal es una lesión compleja por ser una herida contaminada con un alto riesgo de infección y complicación porque puede comprometerse la integridad uretral y de los cuerpos cavernosos del paciente. Sin embargo, es una entidad tan infrecuente que no existen guías clínicas que establezcan el correcto manejo de este tipo de lesiones. Conclusión: Se requieren más publicaciones de estos casos y elaborar guías de práctica clínica estandarizadas que permitan una mejor recuperación de los pacientes tanto estética como funcional.

Descripción del caso clínico: Presentamos el caso de un varón de 55 años que acudió al servicio de urgencias del hospital tras haber sido mordido en el pene por su perro. Este accidente le ocasionó varias lesiones en la superficie del glande y una avulsión circunferencial de la piel desde el surco balanoprepucial hasta la base del pene. El escroto, testículos, cuerpos cavernosos y uretra estaban intactos. Relevancia: El traumatismo genital causado por mordedura animal es una lesión compleja por ser una herida contaminada con un alto riesgo de infección y complicación porque puede comprometerse la integridad uretral y de los cuerpos cavernosos del paciente. Sin embargo, es una entidad tan infrecuente que no existen guías clínicas que establezcan el correcto manejo de este tipo de lesiones. Conclusión: Se requieren más publicaciones de estos casos y elaborar guías de práctica clínica estandarizadas que permitan una mejor recuperación de los pacientes tanto estética como funcional.