INTRODUCCIÓNLas ventajas de la cirugía mínimamente invasiva son ampliamente aceptadas por la mayoría de los urólogos. Corta estancia hospitalaria, menor dolor en el postoperatorio, menor íleo paralítico y más rápida reincorporación a su actividad habitual son beneficios claramente en relación con la cirugía laparoscópica (1,2). Sin embargo, la visión bidimensional del campo operatorio así como una limitación en la libertad de movimientos suponen un reto para el cirujano e indudablemente un riesgo para el paciente. La cirugía laparoscópica es, sin duda, la téc-nica ideal para procedimientos básicos que requieren de una mínima reconstrucción. Sólo un pequeño grupo de urólogos ha desarrollado una laparoscopia avanzada que les permite manipulaciones complejas como suturas, nudos, y por tanto una avanzada cirugía reconstructiva. Además el tiempo requerido para desarrollar esta capacidad es alto y por tanto no al alcance de la mayoría de los cirujanos (3).Antes de establecer un programa de robótica en cualquier centro deben ser evaluados una serie de puntos fundamentales:1. Especialidades quirúrgicas implicadas y procedimientos a realizar.
scite is a Brooklyn-based organization that helps researchers better discover and understand research articles through Smart Citations–citations that display the context of the citation and describe whether the article provides supporting or contrasting evidence. scite is used by students and researchers from around the world and is funded in part by the National Science Foundation and the National Institute on Drug Abuse of the National Institutes of Health.