Surge de la experiencia personal y profesional del investigador, quién a través de procesos auto y heterorreferenciales se preocupa por la construcción y deconstrucción de las historias de malestar narradas por adultos (padres de familia y terapeutas de la IPS INEA) que cuidan, apoyan u orientan a otros que, por situaciones de salud física o mental, requieren de cuidados específicos. En este caso, niños con problemas de aprendizaje. Desde la perspectiva escogida para desarrollar esta investigación-intervención, las situaciones se convierten en experiencia, cuando el ser humano crea narrativas para hablar acerca de ellas. Dicho de otra manera, el significado de la experiencia se crea cuando la persona narra la situación que le aconteció. El problema de investigación son las narrativas de malestar que padres y terapeutas han desarrollado en sus vivencias desde casa y terapia, con los niños que presentan problemas severos de aprendizaje. Así entonces, el objetivo es identificar tales narrativas y transformarlas con una intervención desde la perspectiva narrativa. La investigación ayudó a los padres a reconocer el progreso que han logrado en sus vidas con sus hijos. Para los terapeutas, permitió que reconocieran sus propias emociones, que algunas veces no se visibilizan, al considerarse en ocasiones que el terapeuta no siente dolor o tristeza.