50', la política del Presidente Eisenhower en relación a América Latina proyecta una nueva posición de los Estados Unidos en comparación-con todo el período de la segunda post-guerra. En efecto, en los años anteriores no se había aún definido un activo interamericanismo, por la prioridad que daba Washington a todos sus requerimientos tanto en Europa Occidental como Oriental. Una clara proyección de este criterio fue expresado en Bogotá, 1948, al firmarse el nuevo Convenio Constitutivo de la Organización de Estados Americanos. Sin embargo, importantes sectores en los Estados Unidos, conscientes de la crítica extendida en América Latina, que se expresara particularmente en las reuniones económicas interamericanas de Quintandinha, Brasil, en 1954, y de Buenos Aires, Argentina, en 1957, hicieron que ese criterio fuera cambiado. Mucho influyó en lo anterior el viaje poco receptivo que tuviera, en 1958, el entonces Vicepresidente Nixon hacia algunos países latinoamericanos. En ese contexto, el Presidente de Brasil, Jucelino Kubitchek, planteó la necesidad de una "Operación Panamericana" en una carta dirigida al Presidente Eisenhower,.en marzo de 1958, algunas de cuyas frases consideramos pertinente reproducir: "No es posible esconder, que frente a la opinión mundial, la idea de la unidad panamericana sufre serios perjuicios. No puede dejar de resultar-de desagradables ocurrencias que tanto deploramos-la impresión que nos desentendemos de nuestro continente.. . Como ya expresé a vuestra Excelencia, es aconsejable que corrijamos la falsa impresión de que no estamos viviendo fraternalmente *Exposición efectuada por el autor el 13 de marzo de 1986, en la Universidad de Georgetown, Washington D.C., con motivo del Seminario patrocinado por el "Center for tibe Advanced Studies of the Americas". [125] * Sugerimos extender el actual Convenio "Andrés Bello" a todos los países latinoamericanos.