“…La escuela contemporánea en contextos indígenas es una institución social que tiene en su base histórica una matriz colonial que ha entrelazado, como afirma Salaün (2013), tres procesos: escolarización, cristianización y sujeción colonial. Según Goulet y Goulet (2014) y Smith (2016), la escuela se instaló como un mecanismo de inculcación ideológica de las poblaciones indígenas, a través de una educación racista, civilizatoria, nacionalista, liberal, positivista y eurocéntrica. El impacto se ha manifestado con distintos matices relacionados con: 1) desplazamiento e inferiorización de las lenguas indígenas; 2) subordinación a los marcos epistémicos, culturales y lingüísticos de la sociedad no indígena; 3) desarraigo cultural, lingüístico y territorial en generaciones de estudiantes indígenas; 4) quiebre de las relaciones sociales en las familias indígenas; 5) experimentación de violencia en el sistema escolar colonial; y 6) generación de formas de apropiación y resistencia de la educación escolar (Battiste, 2018;Hébert y St-Amand, 2021).…”