“…Desde que fue creado, el papel nos ha brindado múltiples beneficios mediante su empleo en educación, comunicación, higiene, salud, etc. ; su cadena de producción consta de muchos procesos y planificación, esta comienza con la recolección de la materia prima y termina en diferentes productos, desde cartón hasta papel de alta calidad (Jaehn & Juopperi, 2018); su importancia es tal, que en la actual crisis sanitaria por el COVID-19 se ha dado un incremento en la demanda de productos elaborados de papel, especialmente aquellos utilizados para higiene personal, embalaje de alimentos y de uso médicos (toallas de papel, cajas y bolsas, popotes, papel corrugado para embalaje y transporte de comida, medicinas, entre otros) debido a la creciente conciencia de las personas sobre la higiene y seguridad, y a su vez a la demanda de servicios a domicilio por el aislamiento (Liu et. al., 2020).…”