Unos de los retos científicos de los últimos 40 años, ha sido la búsqueda de la herramienta para el tratamiento del tumor cerebral, el glioblastoma, mortales en el 100% de los casos, utilizando nuestro conocimiento de la evolución, la química de las proteínas, la genética, la biología molecular y la inmunología. Una estrategia eficiente enfocada hacia el factor de crecimiento IGF-I presente en el desarrollo tumoral, fue establecida mediante la construcción de vectores expresando el IGF-I antisentido ARN o el IGF-I ARN formando ARN-ADN triple hélice. Estos vectores introducidos en las células cancerosas in vitro, permiten detener por completo la síntesis de IGF-I en la traducción o a nivel de la transcripción respectivamente. Mientras la inyección in vivo, inducen efecto antitumoral inmune (TCD8+) acompañado de aumento de la supervivencia media de los pacientes. La primera tesis en Colombia que describe la tecnología utilizada, fue presentada en la Universidad Distrital, en febrero de 2016.