El uso excesivo de las redes sociales puede provocar efectos contraproducentes en los jóvenes: aislamiento social, distorsión entre el mundo real y virtual, falta de atención hacia otras actividades, depresión, ansiedad, problemas de salud y fracaso escolar. Ante esta perspectiva, es importante ofrecer información sobre las redes sociales desde una visión educativa. Con este artículo se pretende analizar el impacto que tienen en los jóvenes y estudiar algunos elementos que hay que controlar desde el ámbito educativo. Para ello, se realizó una revisión bibliográfica por diversas fuentes científicas, empleando un total de 116 publicaciones. Tras el análisis de estas fuentes científicas, se concluyó que las instituciones educativas, los docentes y los padres desempeñan un papel significativo para disminuir los desafíos que aparecen al emplear las redes sociales. Las instituciones educativas y los docentes deben ofrecer medios para desarrollar competencias digitales que permitan a los jóvenes desenvolverse de forma adecuada con ellas. Respecto a los padres, es necesario brindarles información para que guíen a sus hijos en la utilización de estas tecnologías.