El presente artículo, hace alusión a la evolución del papel y desempeño de la mujer en sus roles ante la sociedad, contextualizando los acontecimientos que han logrado transformar cronológicamente, ciertos paradigmas, estereotipos sociales, culturales, políticos y económicos tanto a nivel internacional como nacional; haciendo énfasis en los acontecimientos relevantes para que se hiciera eficaz, la participación de la mujer en distintos ámbitos, independientes a la maternidad y la vida familiar, como es el caso de la primera mujer que ingresa como estudiante a la universidad colombiana. Gerda Westendorp fue admitida en 1935 en la Universidad Nacional de Colombia en la carrera de medicina, lo que representó un cambio frente a la apertura del conocimiento en un espacio excluyente y rígido. De igual forma este artículo de reflexión busca identificar la inserción progresiva de la mujer al mercado laboral, identificando las variables que intervienen y condicionan en la sociedad, tales como la formación académica, nivel educativo, salario y lo que realmente significa el techo de cristal o suelo pegajoso, que, a pesar de efectivamente ser obstáculo, que no permiten a la mujer avanzar en espacios significativos que a pesar de los años siguen siendo inmóviles e irrompibles.