“…Dentro de ese espectro nacionalista, los liderazgos de Trump en los Estados Unidos (Hursh, 2018; Gonzales, 2017; Keck y Clua-Losada, 2021); de Al-Sisi en Egipto (Adly, 2021); Bolsonaro en Brasil (Søndergaard, 2021;Saad-Filho, 2019), Orban, en Hungría (Fabry, 2018); y, Duterte en Filipinas (Ramos, 2021), que, aunque llegaron al poder mediante elecciones democráticas, han socavado los valores democráticos a partir de discursos de odio donde prima el fortalecimiento del Estado como parte de la continuidad de neoliberalismo global (Arsel, Adaman y Saad-Filho, 2021). También está el caso de Estonia, donde se ha instaurado el populismo de derecha con un claro discurso antiinmigrante y referencias al poder blanco (Salyga, 2022).…”