“…En este contexto, diversos países han desarrollado sistemas de aseguramiento de la calidad o sistemas de rendición de cuentas que permitan a los gobiernos evaluar el quehacer de las instituciones de educación superior (Davies y Thomas, 2002;Neave, 2001;Power, 1997;Rabovsky, 2012;Saravanamuthu y Tinker, 2002;Saunders, 2010;Seshan y Jain, 2011;Shore, 2010;Suspitsyna, 2010;Torres y Schugurensky, 2002). Así por ejemplo, en Europa se han desarrollado sistemas de indicadores de desempeño vinculados a tasas de retención de estudiantes, graduación, productividad científica de sus académicos, inserción laboral de los titulados, entre otros, (McLendon y otros, 2006;Molas-Gallart y otros, 2002;Saunders, 2010;Suspitsyna, 2010).…”