Este artículo muestra la evolución en el dating show en España entre 1992 y 2010. Se estudian los cambios en la estructura de los programas más vistos de este subgénero del reality, que pasó de preguntar curiosidades sobre las relaciones amorosas a comprobar y desafiar su grado de complicidad En estos años, los participantes de los dating shows estuvieron condicionados por las decisiones que tomaban las productoras para hacer mejores productos de entretenimiento, pero también tuvieron libertad para mostrar su intimidad y su espontaneidad dentro de los límites definidos por el reality. Paradójicamente, hasta que las personas no aprendieron a actuar dentro de un formato y asumieron su condición de personajes, estos programas no lograron más profundidad y realismo.