El filósofo y psiquiatra alemán Karl Jaspers identifica aquellas situaciones vitales que se viven en los límites de la existencia, y que exponen al ser humano ante la profundidad de la experiencia moral. Estas situaciones límite (la culpa, el sufrimiento, la muerte, etc.) trascienden la moral cotidiana, superficial y legalista, y confrontan la existencia a una ética de situación, en la que los medios habituales para resolver los conflictos humanos, la ética normativa y el legalismo de lasformas jurídicas son francamente insuficientes (Jaspers, citado por Gracia, 2008, pp. 23-24).
Las situaciones médicas en el final de la vida,si bien están orientadas por un conjunto de normas y leyes positivas en Colombia (Ley 1733 de 2014, Resolución 971 de 2021, Resolución 825 de 2018, Sentencia C-233 de 2021, entre otras), constituyen situaciones límite en las que entran en conflicto intereses y obligaciones morales. La resolución de estos conflictos no es posible con el simple recurso a las formas normativas, dado que en estos escenarios coexisten valores, afectos y expectativas de múltiples actores que requieren para su resolución del razonamiento moral, el concurso de las virtudes (como la prudencia) y la sensibilidad ética.
Teniendo en cuenta esto, el presente escrito busca aclarar conceptos sobre los tipos de conflicto que pueden presentarse en la atención sanitaria, identificar distintas fuentes intrapersonales, organizacionales y contractuales que distorsionan la excelencia de la práctica médica, así como algunas propuestas para hacer frente a estas situaciones.