La investigación en las ciencias sociales y humanas, en lo que ha transcurrido del presente siglo, ha mostrado la necesidad de una nueva episteme que permita asumirla con una nueva cosmovisión en la que se integren saberes y culturas; y se reconozca la existencia de realidades múltiples. De allí surge lo que se ha denominado como transmetodología, la cual articula diversas técnicas y métodos en forma coherente con la posición teórica del investigador para la producción de conocimiento científico de forma innovadora. Ello exige una práctica de interrelaciones en la cual entran en combinación una visión epistémica amplia, organizada y profunda con reflexiones y experimentaciones audaces, donde además intervienen lógicas múltiples de comprensión de la realidad sociocultural. Se concluye que pensar en el abordaje de la problemática de una investigación que se desarrolla desde la propuesta transmetodológica, implica la integración de tres dimensiones fundamentales que son: la contextualización del problema, con el fin de ubicarlo en el contexto desde el cual se aborda; la investigación empírica en tanto recurso metodológico y la práctica teórica como medio de trabajo.