La presente tesis analiza una historia poco conocida, la adopción y desarrollo de una disciplina emergente dentro de la biología como lo es la biología sintética, la cual se desenvuelve bajo dos lógicas de apropiación de los conocimientos a nivel mundial opuestas entre sí, ante la carencia de estudios que den cuenta de dichos procesos en los países en vías de desarrollo a pesar de los efectos y consecuencias negativas que podría traer para algunas naciones. La investigación se delimita al estudio de caso de México y dentro del marco temporal que parte del 2006 hasta el 2019, retomando los aportes teóricos de Hernán Thomas respecto a las trayectorias socio-técnicas que se desarrollan dentro de los Estudios Sociales de la Ciencia, Tecnología y Sociedad como marco de análisis. Primero se reconstruyen de forma histórica y temporal las tres fases que ha vivido el país con la biología sintética, resaltando la participación de los actores centrales en el proceso que han marcado las pautas de desenvolvimiento y las orientaciones respecto a las formas de apropiación. Posteriormente, se exponen los problemas que traen consigo la biología sintética en el tema bioseguridad, principalmente en las formas de acceso y participación de los beneficios a partir de la utilización de los recursos genéticos como lo propone el Convenio de Diversidad Biológica (CDB), resaltando las implicaciones de la digitalización de las secuencias genéticas para el país. Por último, se ponen a consideración los efectos de los derechos de propiedad intelectual retomando el papel de las patentes en el acceso a los recursos genéticos en México ante los vacíos legales en los cuales opera actualmente. Concluyendo que las dos opciones que plantea la biología sintética respecto a las formas de apropiación podrían tener impactos negativos para el país, donde se privilegia la forma de apropiación privada de los recursos genéticos.