Este artículo analiza la visión político-educativa ideada por José Ortega y Gasset para abordar el problema de España. Para ello se estudian un conjunto de escritos iniciales del filósofo, publicados entre 1908 y 1914, en los que trata los siguientes conceptos: cultura, minoría, pueblo, pedagogía social, Parlamento, opinión pública, liberalismo, nueva política y regeneración. Hacia 1910, Ortega piensa que la principal carencia de España es su atraso cultural respecto a Europa. Para afrontar esta carencia, el pensador desarrolla dicha visión reclamando la acción educadora de una minoría reflexiva que debe proponerse dos objetivos relacionados: educar al pueblo español y elevar el nivel cultural de este. De esta manera, Ortega argumenta que no es posible crear un proyecto político coherente para el país sin un desarrollo cultural y educativo previo. Así que educación y cultura se conciben como herramientas impulsoras del cambio sociopolítico. Por ello, el autor imagina una visión político-educativa reflejada, a su vez, en un proyecto de regeneración del país, que libere a este de los elementos que impiden el desarrollo sociocultural. Dicho proyecto regenerador tiene un medio principal que es la “nueva política”, pero también diferentes limitaciones que llevan al fracaso del primero.