“…Según (Araya Pizarro & Rojas Escobar, 2021), el consumo orgánico se ha vinculado en cambio, con la Teoría de Activación de Normas, y, estudios realizados en Ecuador, han demostrado que los consumidores que se consideran socialmente responsables se relacionan con un modelo de activación de normas, donde las conductas se reflejan dentro de un campo prosocial con la finalidad de establecer un beneficio a favor de la comunidad. Es así como, cuando los consumidores manifiestan comportamientos de compra en base a productos orgánicos, se activa una teoría de norma que implica que las conductas están relacionadas con un beneficio en pro de la sociedad, es decir, siempre están a la expectativa de encontrar productos que sean amigables con la naturaleza.…”