“…Género, 7, e582 e-ISSN 2395-9185 Parece que la ciudad había separado a sectores que antes convivían en un mundo clandestino común para protegerse del rechazo social. Otras investigaciones han sugerido que, desde los años sesenta, la creciente urbanización de la Ciudad de México permitió la creación de espacios de socialización específicamente homosexuales para las clases medias y altas, que antes debían trasladarse a los establecimientos nocturnos de ocio popular para alejarse de la mirada de los otros (Boivin, 2013). Podría pensarse, incluso, que junto al avance del discurso de liberación homosexual, se sumó, como impulso a la movilización de homosexuales, el impacto de una persecución policiaca que afectaba, cada vez más, a sectores medios y altos (González Romero, 2019).…”