“…Aunque desde el lado biologicista los estudios señalan la existencia de diferencias sexuales en las habilidades cognitivas, tales como diferentes formas de procesamiento de la información que explicarían, al menos, parcialmente el rendimiento diferencial de hombres y mujeres -a favor de los primeros en Matemática y de las segundas en Lenguaje- (Echavarri, Godoy & Olaz, 2007;León & Salazar, 2014), los estudios comparativos a escala internacional muestran que al menos en países como Estados Unidos y Rusia, tales brechas no se presentan (Ma, 2008) o, de hacerlo, tienden a ser cada vez más pequeñas especialmente en lo referente a Matemática (McGraw, Lubienski & Struchens, 2006;Ma, 2008;Grant & Behrman, 2010). Esto último pone en entredicho los supuestos biologicistas y sugiere otros condicionantes del rendimiento académico.…”