“…La LAM cuenta con dos etiologías principales, una asociada a esclerosis tuberosa (Goldklang M., 2021) y otra derivada de mutaciones en los genes TSC1 o TSC2 (Suter et al, 2023;Jones et al, 1999). En cualquiera de los casos, la enfermedad se manifiesta cuando la función defectuosa del gen TSC1 incrementa la expresión de la vía mTOR, ocasionando una sobreproducción de fibras musculares así como acumulación de lípidos en el tejido pulmonar (Bernardelli, et al, 2023). Tras esto, la evolución clínica es paulatina y se caracteriza por producir un cuadro clínico de tos, disnea y hemoptisis (Okoh et al, 2021).…”