“…Y esto debería llevarnos a pensar reflexivamente sobre nuestra práctica, es decir la práctica de los académicos, cuando operan con ideales como si fueran teorías o modelos. Hecho esto, lo que inicial-mente era un conocimiento proyectivo, legítimo e imprescindible, se convierte, como le ocurre en nuestra opinión con las ideas de Schön, en un conglomerado de creencias (Sánchez, 2006). Desgraciadamente, si esas creencias penetran en (¿dan color a?)…”