“…Asimismo, estudios realizados en diferentes estados de la República Mexicana han encontrado que jóvenes de la Ciudad de México y su zona metropolitana (Álvarez et al, 2003;Mancilla-Díaz et al, 2009;Unikel-Santoncini, Bojórquez-Chapela, Villatoro-Velázquez, Fleiz-Bautista y Medina-Mora, 2006;Unikel, Saucedo-Molina, Villatoro y Fleiz, 2002;Unikel et al, 2000;Vázquez et al, 2005) y de los estados de Aguascalientes (Martínez, Álvarez, Góngora, Franco y Mancilla, 2009); Guanajuato (Chávez, Macías, Gutiérrez, Martínez y Ojeda, 2004); Hidalgo (Saucedo-Molina, Escamilla-Talón, Portillo-Noriega, Peña-Irecta y Calderón-Ramos, 2008; Saucedo-Molina y Unikel, 2010), Jalisco ; Nuño-Gutiérrez, Celis-De la Rosa y ), Michoacán (Bojórquez y Unikel, 2004), Nuevo León (Alvarez et al, 2003 y Querétaro (Aguilera y Milián, 2006) presentan conductas alimentarias que suponen un riesgo para el desarrollo de TCA (e.g. dieta, atracón, consumo de producto para adelgazar, ejercicio para quemar calorías, vómito, uso de laxantes).…”