Este trabajo busca caracterizar la gestión cotidiana de la política pública en salud que tiene como destinatarias a mujeres migrantes de zonas rurales de Bolivia en una ciudad de la Patagonia, Argentina. El trabajo de campo se realizó entre los años 2016 y 2018 en dos centros de atención primaria de salud, ubicados en barrios periurbanos de la ciudad de Comodoro Rivadavia, a través del acompañamiento en las tareas cotidianas de efectoras de salud, encuentros, charlas y entrevistas con profesionales, funcionarios y mujeres migrantes. Se evidencia una política focalizada y tutelar en lo que respecta a la salud de migrantes, que vela una lectura generizada, etnicizada, de clase social y generacional, fundamentando técnicas de control y subjetivación, que en algunos casos se presentan disputadas. Desde un enfoque etnográfico, aportes de la antropología de la salud, del Estado y una perspectiva de género interseccional se da cuenta de la producción y gestión del riesgo, así como de sus tensiones en contextos de desigualdad.