“…En la actualidad, se mantiene en uso la noción de "tomas" y "campamentos", y si bien se sigue observando una activa participación de mujeres en estos espacios, también se advertirían dinámicas diferenciales respecto a momentos históricos previos. Una de estas es la presencia de población migrante sudamericana, reportada principalmente (aunque no solo) en campamentos del norte del país 2 (Aedo, 2017;Imilán, Osterling, Mansilla y Jirón, 2020;Liberona y Piñones, 2020;López, Flores y Orozco, 2018), así como la existencia de familias desplazadas por la violencia política y los conflictos armados de sus países de origen, quienes se trasladarían a campamentos como una oportunidad de sobrevivencia y reunificación familiar (Echeverri, 2016). Esta situación se ha registrado principalmente en migraciones de mujeres indígenas y afrodescendientes bajo procesos de desplazamiento forzado (Amador, 2010;Echeverri, 2016), lo que rememora procesos de diásporas internas, como la mapuche, reportada en investigaciones sobre tomas de tierras y configuración de otras territorialidades (Alvarado, 2016;Antileo, 2012).…”