El Dominio Afectivo en La Resolución De Problemas Matemáticos: Una Jerarquización De Sus Descriptores

Abstract

ABSTRACT:At present the relevance of the affective domain in the learning and personal development and, specifically, in mathematics and mathematics problem solving (MPS) is observed. However, as Gómez-Chacón ( 2000) suggests, a persistent problem in the understanding of affect in the teaching and learning of mathematics has been to find a clear definition of what is affection or the affective domain. That is why the aim of this paper is to provide a clear definition of the affective domain in mathematics and MPS as well as identify and rank the descriptors or dimensions that comprise this construct: attitudes (mathematics and toward mathematics) , emotions (emphasis in anxiety as the most influential in the MPS) and beliefs ( about the nature and the teaching and learning of mathematics and MPS, about the social context and about self as problem solver. As a innovative aspect, further elucidate the discussion between consider the anxiety as an emotion or attitude, we include generalized control expectations (contingency, helplessness, belief in luck, self-efficacy and success) in beliefs about oneself as a mathematic learner and mathematics problems solver.. Keywords: affective domain; mathematics problema solving; beliefs; attitudes; emotions. RESUMEN:En la actualidad queda constatada la relevancia que tiene el dominio afectivo en el desarrollo y en el aprendizaje de las personas y, de forma concreta, en las matemáticas y la resolución de problemas matemáticos (RPM). No obstante, tal como indica Gómez-Chacón (2000), un problema persistente en la comprensión del afecto en la enseñanza y aprendizaje de las matemáticas ha sido encontrar una definición clara de qué es el afecto o el dominio afectivo. Es por ello que el objetivo

Creencias, actitudes y emociones de un grupo de profesores de primaria en la enseñanza de temas sobre Educación Ambiental.

“…Según Caballero et al (2014), las creencias son estructuras cognitivas que le facilitan al sujeto categorizar y seleccionar la información que recibe del entorno para construir sus propias ideas y visión del mundo, posibilitándole organizar su identidad social, así como realizar anticipaciones y juicios de la realidad. McLeod (1992) realiza una clasificación de las creencias en cuatro categorías, en función del objeto en el que se cree: las creencias sobre la naturaleza del campo disciplinario y su aprendizaje, sobre uno mismo como aprendiz en términos de autoeficacia en la enseñanza del campo disciplinario y creencias acerca del contexto social.…”

“…Fue posible identificar una serie de creencias que, en relación con Caballero et al (2014) posiblemente se construyeron a través de la influencia del conocimiento experiencial de los participantes. La mayoría del profesorado tiene una visión ambientalista y naturalista de lo ambiental, que corresponde a las definiciones más tradicionales de EA.…”

“…Las pruebas de contraste mostraron que no había diferencias significativas entre el profesorado que tenía experiencia en asuntos relacionados con la EA y aquellos que no, como tampoco entre el profesorado que enseñaba Ciencias Naturales y los que impartían otra asignatura. No obstante, consideramos que el conocimiento juega un papel importante en el dominio afectivo, de acuerdo con algunos autores (Reeve, 2009;Bisquerra, 2010b;Caballero et al, 2014) el conocimiento previo o experiencial, de alguna manera condicionan las creencias, actitudes e intensidad de las emociones que experimenta el sujeto frente a determinada situación.…”

Affective domain and mathematics achievement of Colombian students under multiple correspondence analysis

“…For more than two decades, various researchers, including McLeod (1988McLeod ( , 1992McLeod ( , 1994, Gómez ( , 1998Gómez ( , 2000, Gil Ignacio et al (2005), Martínez (2005), Gil et al (2006), Caballero et al (2008), and Blanco (2012), among many others, have recognized the importance of affect or emotions in the educational processes surrounding the learning of mathematics. In this regard, Caballero Carrasco et al (2014), citing Gómez (2000), state that "a persistent problem in the understanding of affect in the teaching and learning of mathematics has been to find a clear definition of what affect, or the affective domain is" (p. 234). In Gil Ignacio et al (2005), it is stated, [T]he relationship between affect and learning is cyclical: on the one hand, the student's experience of learning mathematics provokes different emotional reactions and influences the formation of beliefs; on the other hand, the beliefs held by the subject have a direct consequence on their behavior in learning situations and on their ability to learn.…”