de las conductas de clasificación 1s en el niño. Aspectos lingüísticos. 1 y perceptivos * Las conductas de categorización cons-tituyen una de las actividades más frecuen-tes e importantes en la vida del niño que, desde muy pequeño, comienza a clasificar objetos geométricos, colores, animales, etcétera (Sugarman, 1983), para saber des-pués, hacia los siete años, que un elemen-to pertenece a un conjunto (ejemplo: el gato pertenece al conjunto de los anima-les domésticos) y un subconjunto está incluido en el conjunto total o supraor-denado. Pero esta importancia no se limi-ta exclusivamente a los arios de la infan-cia, sino que el mismo adulto manifiesta frecuentemente sus habilidades clasifica-torias en circunstancias diversas, sea or-denando simplemente el material disper-so ubicado sobre su mesa, sea como biólogo que construye taxonomías con animales y plantas para facilitar su estu-dio, sea, en fin, como psicólogo, que requiere, igualmente, categorizar las con-ductas para su mejor comprensión. No sería, pues, excesivo afirmar con Mark-man (1983) que la clasificación constituye una actividad fundamental del conoci-miento humano.