El presente artículo tiene como objetivo analizar las posibles diferencias en la valoración actual del rey emérito, Juan Carlos I, y explicarlas a través de una lectura emocional. Mediante el uso de técnicas cuantitativas, entre los hallazgos se muestra, por un lado, un salto generacional diferencial en la valoración del rey emérito, y por otro, un desarrollo emocional diferente hacia el rey emérito según se referencie su papel en la transición o la actualidad. La valoración del ex jefe de Estado es explicada únicamente a través de emociones positivas hacia el rey emérito cuando estas se ciñen a la transición, mientras su valoración mediante emociones actuales conjuga emociones positivas y negativas.