“…Como sustento de esta afirmación, el marco actual de investigación del BT se ha centrado en estudios sobre sus propiedades mecánicas (Gandia, Gomes, Corrêa, Rodrigues y Mendes, 2019;Mahmood, Habeeb y Al-Jumaili, 2019), térmicas (Mosquera, Canas, Cid-Falceto y Marcos, 2014;Molar-Orozco, Velázquez-Lozano y Vázquez-Jimánez, 2020;Miloudi et al, 2019;Wati, Bidoung, Damfeu, y Meukam, 2020) y de durabilidad (Fernandes, Peixoto, Mateus y Gervásio, 2019; Lavie Arsène, Frédéric y Nathalie, 2020; Jové Sandoval, Muñoz de la Calle y Pahíno Rodríguez, 2011). Otros avalan la utilización del BT argumentando aspectos económicos, baja toxicidad e, incluso, como producto que favorece la calidad del aire interior (Fernandes et al, 2019).…”