“…Todas las fuentes, estadísticas de servicios sanitarios pero también encuestas de salud, confirman que la morbilidad total se incrementa con la edad y que, en cada edad, es mayor entre las mujeres que entre los hombres (Davies, 1985). En este sentido, diversos autores han puesto de manifiesto que el factor preponderante de la frecuentación hospitalaria es la edad, amén de otros factores demográfi-cos, lo que influye, además, en la duración de la estancia y el tipo de servicio (Sourty-le-Guellec, M. J., 1986); la tasa de presencia en hospital evoluciona en función de la edad siguiendo una curva en forma de «J», con una mayor frecuentación de mujeres, de viudos y divorciados, de obreros y empleados frente a cuadros superiores e inter- medios, y de jubilados y parados frente a activos (Sourty-le- Guellec, M. J, 1986;Sermet, C, 1987;Sourty-le-Guellec, M. J., 1993).…”