“…Existen una serie de ventajas potenciales de los tratamientos de autoayuda con manual, entre las que se incluye un mayor mantenimiento de los efectos del tratamiento (Glasgow, Schafer y O'Neill, 1981), lo cual es de vital importancia, puesto que la recaída constituye el principal problema de todas las conductas adictivas. Otras ventajas de la utilización de manuales son (Curry, 1993): 1) la posibilidad de ser aplicados por personal no especializado; 2) distribución a un bajo coste en una variedad de contextos; 3) se pueden elaborar para diferentes poblaciones diana (p.ej., basándose en el estadio de cambio o en características específicas de los fumadores); 4) los fumadores pueden adapteu-el programa a sus necesidades específicas (por ejemplo, variar el orden en que se realicen los ejercicios recomendados), pueden seguirlo a su ritmo y terminarlo más tarde; 5) por la posibilidad de guardar los materiales escritos, los fumadores, que fracasan en su intento de abandono del tabaco, pueden repetir con facilidad el programa (Glynn, Boyd y Gruman, 1990a) y, en caso de haber conseguido la abstinencia y experimentar momentos de tentación o consumos puntuales, se pueden utilizar para trabajar la motivación y reafirmarse en la decisión de mantenerse abstinente.…”