El creciente interés cada vez mayor en fuentes de energías renovables y biopolímeros ha llevado al desarrollo de varias alternativas para sustituir los plásticos tradicionales. El almidón aparece como una materia prima; sin embargo, los almidones nativos presentan algunas limitaciones básicamente asociadas a malas propiedades mecánicas y de estabilidad térmica. La búsqueda de literatura se realizó con la herramienta “Science Direct” y de manera narrativa. Los resultados mostraron que es necesario combinar el almidón con otros materiales poliméricos con el fin de producir un material con mejores propiedades mecánicas, como la resistencia al agua, mayor flexibilidad y resistencia al rompimiento, entre otras. Dando espacio a mas investigaciones en determinación de parámetros óptimos de procesamiento de biopolímeros resistentes a distintos factores.