La rotura uterina es una emergencia obstétrica y puede tener resultados catastróficos. El prolapso intraperitoneal del saco amniótico, también conocido como amniocele, es una manifestación inicial única de rotura uterina silenciosa o completa durante el embarazo. Puede producirse como resultado de una lesión preexistente, anomalías uterinas o alteraciones en la cicatrización uterina. La ecografía tiene papel importante en el diagnóstico de esta afección, ya que es esencial para el manejo de estos pacientes y optimiza la resultante materna y perinatal. Se presenta un caso de paciente de 22 años con dolor abdominal agudo a las 34 semanas de gestación. La ecografía mostró feto viable dentro de la cavidad amniótica junto con oligohidramnios y lesión quística ecogénica de 8 x 6 centímetros, confirmada por ecografía Doppler y tridimensional; se diagnosticó prolapso intraperitoneal del saco amniótico a través de rotura uterina. Durante la cesárea, se identificó el defecto uterino de 1 centímetro en la cara lateral del útero, confirmando el diagnóstico. No se encontraron complicaciones postoperatorias y la paciente se recuperó totalmente.