El surgimiento del COVID-19, fue un fenómeno que afectó sustancialmente a la población. Debido a la facilidad de contagio, organismos de salud como la Organización Mundial de la Salud (OMS) implementaron medidas para intentar contener el virus que ocasiona múltiples síntomas. El objetivo fue analizar el impacto de la pandemia COVID-19 sobre la actividad física y la salud en vista de estudios realizados previamente. La investigación se fundamentó en un paradigma positivista, empleando el metaanálisis por declaración PRISMA, con enfoque cualitativo, diseño no experimental, tipo descriptivo y corte transversal, donde se empleó como estrategia metodológica la revisión sistemática de 21 artículos extraídos de Redib, SD, Esci, Cumed, PubMed, Scopus, Scielo, Dialnet, Redalyc Latindex, Google Académico y otras alojadas en la Universidad Internacional de Andalucía y la Revista Odontología Actual. Se determinó que 28.5% de artículos priorizaron personas que contrajeron el virus o quedaron con secuelas de la enfermedad, personas en aislamiento social que de alguna forma su salud fue perjudicada en lo físico y psicológico y social, 14.2% priorizaron edades entre 18 a 85 años sin distinción de sexo y solo 4.7% de estudios priorizó los apoderados de niños de 5 a 7 años, 4.7% priorizó en mujeres adultas, 4.7% priorizó estudiantes de secundaria, preparatoria y 42.8% no reportan, concluyendo que diversos estudios hacen referencia la práctica de actividad física como herramienta provechosa e indispensable en la salud como prevención, tratamiento o rehabilitación en personas frente a enfermedades no transmisibles, secuelas del COVID-19, enfermedades psicológicas entre otras.