“…Por tanto, a la luz de la teoría crítica, concebida como una tradición teórica desarrollada por un grupo de intelectuales de la Escuela de Frankfurt, entre los que se encuentran Herbert Marcuse y Jürgen Habermas, entre otros, se propone el aná-lisis crítico de diferentes formas de dominación (Kincheloe, 2004) y, por ende, se asume la hegemonía y expansión del inglés no como un fenómeno apolítico, neutral, y necesariamente beneficioso, como de manera tradicional lo ha hecho ver la lingüística aplicada bajo el paradigma positivista y estructuralista (Edge, 2003;Kubota, 2002;Pennycook, 1994Pennycook, , 2000Pennycook y CoutandMarin, 2003;Phillipson, 1992Phillipson, , 2001Phillipson y Skutnabb-Kangas, 1996;Phipps y Guilherme, 2004), sino más bien como un fenómeno social cargado de ideología, valores e intereses sociales, políticos y económicos (Auerbach, 1995;Canagarajah, 2002;Kubota, 2002;Macedo, Dendrinos y Gounari, 2003;Pennycook, 1994;Phillipson, 1992;Tollefson, 1995).…”