“…A pesar de que numerosos autores han destacado la creciente desestructuración e individualización de los procesos de emancipación juvenil (Evans y Furlong, 1997;Walter, 2006;Mandic, 2008), existen diferencias significativas entre países y regiones en las tasas de emancipación de las personas jóvenes que simplemente responden a factores estructurales de índole económico, social, cultural y político-institucional. Con el propósito de encontrar las razones de dichas diferencias, buena parte de la investigación comparada de corte estructuralista ha estudiado los patrones de emancipación europeos desde aspectos tan diversos como el modelo de formación de hogares (Iacovou, 2002;Berthaud y Iacovou, 2004), el mercado laboral y el sistema educativo (Breen y Buchman, 2002;Feijten y Mulder, 2005), el sistema de vivienda 2 (Mandic, 2008; En este contexto, el objetivo del presente artículo es analizar, desde un planteamiento estructuralista, en qué medida las políticas de vivienda y empleo, y el modelo de Estado de bienestar en el cual se enmarcan pueden llegar a explicar las diferencias en las tasas de emancipación residencial juvenil de los países europeos.…”