“…Aunque el desarrollo de la educación inclusiva en la universidad no ha sido tan intenso como en los niveles de enseñanza anteriores (Echeíta Sarrionandía, 2016), recientemente se han publicado algunos trabajos desde diferentes perspectivas como las dificultades de adaptación a la enseñanza de los estudiantes con discapacidad (Álvarez Pérez, Alegre de la Rosa y López Aguilar, 2012), la discapacidad intelectual (Izuzquiza y Rodríguez, 2016) o la aplicación del diseño universal a la educación universitaria, entre otros temas. No obstante, continúa haciéndose patente la necesidad de una mayor profundización sobre la inclusión en Educación Superior, teniendo muy presente que es en el ámbito de la educación superior donde se puede hacer más visible la concepción de que las causas de la discapacidad no son tanto referidas al sujeto sino más bien al sistema social (Barton, 1999;Oliver, 1999;Hughes y Paterson, 2008).…”