Ante el nuevo escenario ocasionado por el periodo de confinamiento, los centros educativos y los docentes tuvieron que reconducir sus modelos formativos desde diferentes aspectos, entre ellos las tareas escolares. Este estudio descriptivo-inferencial, transversal, no experimental y de corte cuantitativo tiene como objetivo principal identificar la cantidad, la dificultad y las tipologías de las tareas escolares desarrolladas en periodo de confinamiento en función del tipo de centro, de la etapa y de la presencia de necesidades educativas, contando con una muestra de 1.787 familias. Los resultados muestran que, según la percepción de los progenitores, durante el confinamiento los deberes escolares se han caracterizado por una mayor cantidad, dificultad, individualización y tecnologización de los mismos. En relación con las variables escolares, la etapa educativa guarda una importante significación con la percepción de la dificultad, la cantidad y las modalidades de tareas académicas. Además, la presencia de necesidades específicas de apoyo educativo influye en la dificultad y la titularidad del centro en el ejercicio de trabajos individuales o grupales. A modo de conclusión, se remarca la necesidad de asesorar a las familias de Educación Secundaria y de dotar de una mejor formación a los docentes en cuanto al uso de los deberes escolares en referencia al alumnado con necesidades educativas.