“…Desde las teorías pedagógicas actuales y las políticas públicas en educación se ha construido un 'mapa escolar' que no ha considerado, de manera adecuada, las realidades educativas latinoamericanas (Calvo, 2016). Realidades caracterizadas por una tremenda desigualdad en función del género, la identidad sexual, la etnia y la clase social (Castillo, Palacios, Joignant et al, 2015;López, Figueroa & Gutiérrez, 2013;Tijoux & Cordova, 2015). El no considerar adecuadamente estas realidades ha tenido como consecuencia la construcción de una única escuela, normalmente homogénea y aséptica, que no es capaz de contextualizarse en función de los sujetos que la habitan y de los territorios en donde estos se sitúan.…”