De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud más de 1 billón de personas distribuidas en 149 países son afectadas por enfermedades tropicales desatendidas, ocasionando cuantiosos daños económicos, sociales y psicológicos a las personas afectadas, así como un elevado gasto estatal. El envenenamiento por mordedura de serpiente es una de las más desatendidas: se estima que anualmente de los casi 5 millones de mordeduras de serpiente que ocurren a nivel mundial, la mitad genera envenenamientos que ocasionarían entre 94-125 mil muertes, 400 mil amputaciones y otras secuelas severas. Por ello se realizó una búsqueda en Pubmed para identificar publicaciones en los que se hayan usado terapias complementarias o tradicionales o alguno de sus componentes. De los 142 artículos, 18 artículos fueron seleccionados por tratarse de estudios in-vivo para identificar el efecto antiofídico de los compuestos. Los estudios seleccionados se enfocaron en evaluar el efecto antihemorrágico (13/18), anti-edematoso (11/18), anti-necrotizante (5/18) y de reducción de letalidad (4/18). Se estudió el efecto de los compuestos en veneno de Bothrops atrox (6/18), Bothrops jararaca (5/18), Bothrops asper (3/18), Bothrops jararacussu (2/18), Bothrops erythromelas (2/18), Bothrops paulensis (1/18), Crotalus adamanteus (1/18), Crotalus durissus terrificus (1/18), y Lachesis muta (1/18). De las 24 plantas evaluadas, se encontró mayor cantidad de publicaciones sobre el efecto terapéutico de Bellucia dichotoma, Connarus favosus, Plathymenia reticulata, Jatropha gossypiifolia y Renealmia alpinia.