En la zona marino-costera a nivel mundial existen diversos ecosistemas que se desarrollan de gran importancia para los seres humanos. Ejemplos de estos ecosistemas incluyen los arrecifes coralinos, los manglares, así como también, las praderas de pastos marinos. Las praderas de pastos marinos son ecosistemas que se desarrollan a partir de plantas verdaderas monocotiledóneas, también conocidas como “fanerógamas marinas” que habitan en medios salobres y/o marinos (Larkum, Orth & Duarte, 2006). Estas praderas brindan una gran cantidad de servicios ecosistémicos a los seres humanos, como lo son la filtración de nutrientes, secuestro de carbono y el desarrollo de una compleja maraña trófica asociada (Nordlund et al., 2018). Entre los organismos asociados a las praderas de pastos marinos se encuentran diversas especies de cangrejos, camarones, erizos y peces de interés comercial; así como también, especies amenazadas como las tortugas marinas y manatíes (Valentine & Duffy, 2006). Sin embargo, los pastos marinos son un ecosistema que ha desaparecido y se ha deteriorado a nivel mundial en décadas recientes (Waycott et al., 2009). En este trabajo, realizo un análisis crítico del estado de conocimiento actual sobre este ecosistema marino-costero de tanta importancia en la costa Pacífico y Caribe de Costa Rica basado en las investigaciones recientes en dicho país.