El artículo ahonda en las principales transformaciones que el periodismo de conflicto ha vivido en el último siglo y medio y trata de identificar los retos a los que se enfrenta en la actualidad. Para ello, además de una amplia revisión bibliográfica a trabajos académicos, biografías o libros publicados por periodistas, se han realizado 24 entrevistas en profundidad a profesionales con experiencia en la cobertura de conflictos, responsables de la sección internacional de varios diarios españoles, y a militares con experiencia en gestión de información pública en operaciones y en formación en materia de seguridad para periodistas. Entre las conclusiones destacan, por un lado, el impacto que la cobertura de conflictos ha logrado más allá de los medios y el rol de la tecnología como elemento transformador de los perfiles y la práctica profesional. Todo esto, en un contexto de aumento de la peligrosidad de la profesión y de la precarización del periodismo, también en zonas de conflicto, dejando atrás el mito del corresponsal de guerra y planteando nuevos retos, como el abordaje de la cuestión de la seguridad, la inclusión de la perspectiva de género en este ámbito o el fin del tabú que constituye el síndrome del estrés postraumático.