“…Además, la aparición de burbujas inmobiliarias, que tanta importancia alcanzaron en diferentes países desde la década final del siglo pasado y que tanta atención han suscitado entre los investigadores urbanos, suele ir de la mano de la paralela existencia de burbujas hipotecarias, donde el crédito abundante y barato, junto a las expectativas de rentabilidad creciente, desencadenan una espiral de precios ascendentes que desafía cualquier criterio de racionalidad (Algieri, 2013;Bosch, 2019). No cabe duda de que los intensos procesos de construcción y destrucción que han conocido muchos espacios urbanos responden a causas múltiples, ajenas por tanto a las explicaciones monocausales que pretenden ofrecer respuestas simples a problemas complejos, incentivadas en ocasiones por una cultura mediática amiga de la brevedad.…”