El movimiento obrero suele presentarse como un fenómeno de las grandes urbes. Sin embargo, la concentración urbana y en torno a la industria, no constituyeron las condiciones objetivas de miles de trabajadores argentinos. Para estudiar cómo se vencieron los desafíos de un medio rural, reconstruiremos la experiencia entrerriana. Una provincia con una gran dispersión demográfica y sin una ciudad que hegemonice la vida social se presenta como un espacio propicio para analizar la evolución del movimiento obrero. El recorte abarca desde la primera huelga general hasta la crisis de la Unión Obrera Provincial de Entre Ríos en 1937.