La fabrique des saints (Note critique)

Abstract

La floraison, dans les toutes dernières années, des études sur le culte des saints et l'hagiographie au Moyen Age témoigne du dynamisme de ce chantier d'histoire et de la conscience qu'ont les historiens de son importance pour la compréhension des sociétés médiévales. Je voudrais ici moins dresser un bilan de tous ces travaux que proposer quelques réflexions nécessairement partielles, et volontairement partiales puisque centrées sur deux livres ou mieux deux œuvres : d'une part les derniers travaux de Peter Brown sur l'Antiquité tardive et les premiers siècles du christianisme ; d'autre part, pour les trois derniers siècles du Moyen Age, la belle thèse et un recueil d'articles d'André Vauchez. Ces deux ensembles de publications guideront ma réflexion, nourrie par ailleurs d'un grand nombre de travaux récents, souvent eux aussi d'une très grande richesse, qu'il s'agisse de colloques internationaux, de recueils collectifs ou de travaux individuels.

Os Processos de Canonização como fonte para a História Social

“…Didier Lett escreveu que um processo de canonização permite analisar a "fabricação de uma sociedade". Essa expressão é uma (re)utilização da forma co-134 mo Jean-Claude Schmitt definiu, em 1984 9 , os textos de Peter Brown sobre o culto dos santos no início do cristianismo 10 e a citada tese de André Vauchez. Schmitt concluiu que ao escolher um santo, uma sociedade não cultuava a memória do indivíduo, e sim, uma construção abstrata baseada em padrões hagiográficos.…”

“…Apesar de não caracterizar nem definir quais e como seriam esses padrões, o autor apontou algumas direções, como a relação com os mortos, a intercessão junto a Deus, a importância das relíquias e do lugar de sepultamento. 11 No mesmo período, e com orientação teórica claramente weberiana, Dolnald Weinstein e Rudolph Bell analisaram a santidade a partir de tipos ideais.…”

Las vidas occitanas de santas tardomedievales: sacra infantia, formación e imitación

“…De hecho, poco importa que los relatos fueran escritos con posterioridad a la muerte de estas mujeres, puesto que la construcción de la santidad desde un punto de vista fenomenológico no viene establecida por la escritura de un documento, sino que remite a las percepciones sociales a las que el texto alude. Estas percepciones son "fabricadas" por el texto y no por una supuesta realidad histórica (Schmitt 1984), puesto que son los grupos de presión los que modelan la santidad en primer lugar y la articulan posteriormente dentro de los esquemas canónicos y unos géneros específicos (Lett 2008). Desde esta mirada epistemológica, similar a la que se utiliza para estudiar la mística (Haas 2013;Katz 2013: 5), no se puede entender una "realidad" antes del texto, ya que los fenómenos de espiritualidad no preceden en ningún caso al documento.…”

Nombre, muerte y santificación de una prostituta. Escritura y culto de Botitas Negras

“…En cualquier caso, no se puede pasar por alto que el concepto mismo de "santidad" refiere un proceso de creación de "muertos de elite" o "muertos especiales" fomentado por la iglesia católica para romper con el culto a los ancestros y con la determinación genealógica de esos cultos. Esta sustitución sin embargo conserva un modelo "vertical" de relación con lo divino (Schmitt, 1984). Desde el siglo XII, la reforma gregoriana establece que sólo el papa tendrá la prerrogativa de elegir los santos, lo que es entendido como un intento por promover una "minoría de muertos" y enfrentar así la proliferación de los cultos genealógicos, que también implicaban la producción de una figura abstracta y una memoria compartida.…”

“…Pero la "unanimidad" social no implica un sacrificio (la muerte de un individuo) como en la tesis girardiana, ya que si bien, todo lo sacro ha pasado el umbral de la muerte y los muertos suelen ser unánimemente sagrados, no todas las muertes son sacrificiales. La santificación del sacrificio está históricamente circunscrita a un momento histórico del cristianismo, el de la reforma gregoriana (siglo XII) cuando el papa empieza a elegir a los santos, que son concebidos como "muertos de elite" o "muertos especiales", y responden a una necesidad de promover una minoría de muertos en contra del culto extensivo a los ancestros(Schmitt, 1984).…”