Los planteamientos de Bourdieu (2000;, han sido fundamentales para definir la violencia simbólica como parte de las dinámicas sociales, donde se reproduce la lógica de dominación, bajo la mirada permisiva de diversos actores sociales. Se acepta, por consiguiente, que la violencia tiene una trayectoria histórica y cultural, lo que ha dado espacio a la consolidación de un paradigma patriarcal, que normaliza la subordinación de la mujer. En este orden de ideas, el artículo tiene por objetivo analizar la violencia ejercida de forma simbólica y mediática contra la mujer en las sociedades actuales, considerando las especificidades jurídicas y normativas de la comunidad internacional y del Perú. El diseño de la investigación es de tipo cualitativa, con la aplicación del método-hermenéutico-documental. Entre los principales hallazgos, se sostiene que la prevalencia de la violencia hacia la mujer en escenarios internacionales y en el ordenamiento interno del Perú, forman parte de un engranaje, que excluye, denigra y niega el acceso a la mujer a sus derechos elementales. Se concluye en la necesidad de romper las estructuras sociales, dando paso a la construcción de una racionalidad distinta y la confección de vidas alternativas, más acordes a los cambios sociales requeridos por la sociedad peruana.